Un aspecto importante que la alta dirección debe considerar como parte de la estrategia de
mejoramiento continuo son las formas para reconocer la participación del personal en la
aportación de ideas y el planteamiento de propuestas de mejora, sean por medio de equipos
de trabajo o colaboraciones individuales, porque, cuando se vinculan adecuadamente con la
aplicación sistemática del ciclo PHVA, motivan a las personas a esforzarse más, a poner al
servicio de la empresa su talento, creatividad y capacidad innovadora.